Victorino Luján, un gigante en el Cirque du Soleil

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Actualizado: mayo 11, 2016

La vida a Victorino Luján le demostró que se puede llegar lejos, literalmente. Cerca de cumplir 50 años, aquel chico de 15 y 2,08m que llegó al club Arquitectura jamás se imaginó que iba a convivir entre gimnastas, enanos y payasos al otro lado del mundo.

En diciembre este talento gigante finalizó su vínculo durante diez años con el Cirque du Soleil.

“Tuve que aprender mucho para entender lo que era un payaso realmente. Si bien yo tenía formación actoral, ya que había estudiado teatro con Marcelo de Bellis durante un par de años, tuve que conocer cómo era un circo por dentro. Fue un campo nuevo por descubrir para llevarlo después a escena”, recuerda Victorino.

Comenzó a jugar al básquetbol por pura responsabilidad de su primo, también con una buena altura para el deporte, aunque no centraba todas las miradas como le sucedía a él en su temprana edad.

“Al principio, era un mundo desconocido. No tenía formación deportiva ni había una herencia familiar. Empecé más tarde a jugar y fue un aprendizaje porque me integré a un equipo y pude ser parte de un deporte”.

Luego de Arquitectura, se trasladó a Gimnasia y Esgrima de Villa del Parque, para pasar por Social Parque y Huracán de San Justo tiempo después.

A los 24 años la necesidad lo obligó a tomar una decisión: “No era redituable mientras trabajaba en una dependencia del Ministerio de Defensa”, lo dice y no se lamenta.

“Huracán de San Justo me quedaba a una hora de viaje de mi casa, eso lo hice durante más de un año. Aparte, comencé a trabajar y tenía que estar a las 7 y media a la mañana pero el día anterior yo llegaba a las 11 y media a mi casa”.

“CORTEO” ALREDEDOR DEL MUNDO

Aquel 1998 es un espejismo cada vez que lo piensa una y otra vez. Un solo quiebre en cada detalle que realizó esa tarde-noche podría haber cambiado el rumbo de su vida.

“Sucedió eso que habitualmente nos pasa, de estar en el lugar y en el momento indicado. Fui a ver una obra de teatro de un amigo donde había dos personas que se me acercaron a la salida. Uno de ellos se presentó e hizo lo mismo el canadiense que estaba junto a él”, cuenta Luján en un tono con pausa bien marcada.

“Me contó que estaban buscando atletas para llevar al Cirque du Soleil en Montreal y les sorprendió la altura. Empezó a consultarme si tenía algún pasado con el teatro. La verdad es que yo había realizado teatro en Buenos Aires”.

Ese fue el salto inicial para el único argentino que integró el Cirque du Soleil en la obra llamada “Corteo” presentada durante una década. Dentro de la misma se trasladan más de 150 personas por cada continente, obteniendo admiración y sonrisas de las distintas culturas del planeta.

Victorino Luján en su visita a la Radio Metro durante la gira por Argentina

“Yo también estudiaba canto lírico. Al día siguiente de ese episodio en el teatro fuimos a la casa de mi maestra, donde me hicieron una prueba y se llevaron el video a Montreal. A partir de ahí, no supe más nada hasta el año 2000 cuando vino el circo para realizar audiciones. Me presenté y pasé un par de filtros pero lo único que me dijeron fue que ya sabían lo que podía hacer, lo cual pensé que ya no me llamaban más”.

La paciencia se convertía en desilusión y esperanza perdida para el adolescente que había dejado el básquetbol atrás para dedicarse a su incursión en las tablas teatrales.

“Pasaron los años, aunque siempre me enviaban por correo las novedades del circo. En 2004 me solicitaron material en video sobre lo que estuviera realizando. Pasó otro año, otra vez pidiendo más material y a los pocos días me llegó la oferta por contrato”.

LLEGAR AL CÓMICO PROFESIONALISMO

Canadá hacia fines de 2005 lo reunía exclusivamente con el centenar de compañeros que lo esperaban para ser el payaso principal del espectáculo e iniciar la gira por todo el mundo.

Una premisa de la organización es definir anticipadamente la cantidad de días, meses o año que se instalarán en un país de acuerdo a la densidad de población en cada territorio.

Su recorrido comenzó en Quebec, siguió en Toronto  y unas cuantas ciudades de Estados Unidos para regresar a la zona oeste canadiense, finalizando la travesía por América del Norte en Miami durante 2008.

Al año siguiente, llegó el embarque para cruzar el océano atlántico: Japón durante un año y medio, seis meses en Rusia, un año entero por toda Europa y casi dos en América Latina.

El Cirque du Soleil gira alrededor del mundo con una estimación de vida de diez años para cada uno de sus espectáculos. Se cierra una escuela de vida para él y se recicla la obra “Corteo”. Ese mismo cortejo que lo devolvió a su país.