Se realizaron las Reuniones Regionales de FeBAMBA
Con el objetivo de seguir fomentando el desarrollo del básquet en cada...
Sin dudas Temperley, desde hace unos años para acá se ha convertido en uno de los clubes más fuertes del básquetbol porteño, no sólo por la cosecha de títulos de la primera división, teniendo como máximo logro el ascenso al TNA, siendo campeón del Torneo Federal, sino también por su avance en formativas, con pasos firmes el Gasolero hoy se codea de igual a igual con los mejores.
La buena campaña del año pasado le dio la posibilidad de conseguir un ascenso e instalarse, por primera vez, en el grupo de élite de los campeonatos de divisiones inferiores, el Top 20. En este tipo de desafíos la ilusión es tan grande como la incertidumbre, debido al desconocimiento de la categoría, sin embargo para sorpresa de muchos, el Celeste está llevando adelante una campaña más que interesante con 26 victorias y 17 derrotas, ubicándose en el quinto puesto de la tabla de posiciones general de todas las categorías.
El equipo de trabajo del Celeste cuenta con la coordinación de Mariano Nóblie y los entrenadores son Juan Andrés Veira, al mando de la primera, U17 y U19, en tanto que Andrés Alderete está a cargo de U13 y U15, siendo el preparador físico de todos los equipos Marcos Molina.
En esta ocasión, para adentrarnos un poco más en el mundo Temperley y sus formativas, prensa FeBAMBA charló con uno de los directores técnicos, Juan Andrés Veira, también primer asistente de Leonardo Costa en el equipo profesional.
-¿Esperaban estar teniendo unos resultados tan buenos en esta primera rueda jugando el top 20?
-Honestamente no, es la primera vez que estamos participando en esta división, conociendo el nivel de juego y a los nuevos equipos que nos enfrentamos. Estamos muy contentos con el desempeño de los chicos, que entrenan todos los días para estar a la altura de las circunstancias en cada jornada.
-¿A que atribuís el crecimiento de Temperley en sus formativas?
– A varios Factores se lo adjudico. Primero y principal, al proyecto que se armó hace años y junto a eso, al trabajo en conjunto que se realiza con el cuerpo técnico en todas las divisiones. Lograr entrenar un día más, tener más horarios para trabajar en cancha y una buena base de preparación física, son factores que nos han permitido progresar cada año.
– En este último año han implementado el método de reclutamiento ¿Por donde pasa la selección del jugador a reclutar? ¿Qué es lo primero que se fijan, cualidades deportivas y también personales?
– Tratamos de seleccionar jugadores que tengan proyección, para que sean futuros jugadores de la Primera. Gracias a los dirigentes podemos darnos el privilegio de reclutar algunos jugadores del interior, para desarrollarlos y foguearlos en esta competencia. Intentamos elegir jugadores con buena conducta deportiva y que sumen a nivel colectivo, tanto dentro como fuera de la cancha.
– ¿Hay algún plan estratégico para que las formativas tengan conexión con la primera división, como una filosofía de juego que abarca todo el básquet del club?
– Trabajamos en conjunto desde la primera hasta minibasquet, delineando todo los aspectos estratégicos necesarios para que nuestros jugadores progresen y puedan desarrollarse en varias categorías, siempre apoyándonos en nuestra filosofía de juego. Este año estamos haciendo más hincapié en ese ítem, ya que apostamos a que la primera del torneo de Concernencias este compuesto solo con jugadores de nuestras formativas y apostar a su desarrollo.
– ¿Este buen arranque de competencia les modificó los objetivos planteados para la temporada?
– No, al ser el primer año en la elite, buscamos como objetivo no descender y establecernos en cada categoría. Poder jugarle de igual a igual a los equipos candidatos y superarnos como equipo en cada jornada.
– ¿Tener un equipo profesional ayuda a que se acerquen más jugadores a Temperley?
– Por supuesto que sí, cada año se acercan muchos jugadores al club con intenciones de sumarse a este proyecto y con ganas de probarse en el club, lo cual habla muy bien de cómo se está trabajando en Temperley y sin dudas nos dejas muy contento que cada vez más chicos quieran ponerse la camiseta Celeste.
FOTOGRAFÍA: Gentileza Guillermina Payero