Los papás de Arquitectura despuntaron el vicio

La pasión por un deporte no conoce de límites de edad y solamente entiende del amor de los protagonistas, como sucedió en estos días en el Club Arquitectura, donde se juntaron los padres de los chicos de las Divisiones Inferiores y los jugadores del Maxibásquet para hacer un picado.

Está claro que el básquetbol se convirtió en una gran excusa para juntarse un rato a divertirse, más allá que todos quieren ganar, y generar grandes vínculos sentimentales y de sentido de pertenencia en cada una de las instituciones.

De hecho, una vez que terminó el partido, ambos planteles se trasladaron al buffet del club para festejar un tercer tiempo lleno de alegría y comida. Las anécdotas sobraron en la mesa, que vio ir y venir todo tipo de carcajadas.

Por otro lado, el jueves próximo comenzará un certamen para mayores de 30 años, con cuatro equipos, y finalizará el martes 6 de diciembre.