Righero y su presente en ambas funciones

Hay personas que ingresan un día a un club y sellan para siempre su amor, sin pedir nada a cambio, simplemente vivir por siempre esa pasión y defender los colores de esa camiseta durante el mayor tiempo posible.

Y uno de esos ejemplos de enamoramiento eterno es el que vive Jonathan Righero, quien integra el plantel de la Primera División de Imperio Juniors y al mismo tiempo está al frente del equipo del Minibásquet y de la Escuelita, tras un largo tiempo entrenándose en la institución.

«Tenemos una gran expectativa en el Torneo Superior, ya que a la base que estaba en la temporada anterior, se le sumaron algunos muchachos. Estamos en una etapa de adaptación al nuevo entrenador, Federico Belcastro, que nos pide mucha defensa y que trabajemos en equipo», destacó el basquetbolista.

«Hasta ahora el nivel es bastante parejo, en la caída ante Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires empezamos mal y tuvimos una gran remontada en el segundo tiempo, al punto que forzamos un suplementario y la diferencia terminó siendo mínima», analizó el jugador.

Por otro lado, enfocado en la siguiente fecha, cuando se enfrentaron a Comunicaciones, resaltó que estuvo «para cualquiera» aunque la experiencia del plantel imperialista «pesó en un trámite parejo».

De esta manera, Imperio continúa soñando con protagonizar la primera fase y luego subirse a la Copa Metropolitana, como sueñan el resto de los rivales de su zona.

Finalmente, Righero tuvo palabras para su labor como entrenador con los más chicos del club, un pilar del básquetbol, y evaluó: «Es muy bueno, pese a que este año es complicado, ya que se cruzan excelentes equipos en el Top 20».

«En el Minibasquet apuntamos a que los chicos aprendan los fundamentos del básquetbol, sin dejar de divertirse; priorizamos la enseñanza de valores, y que formen un lindo grupo, acompañados por sus familias», concluyó.

FOTOGRAFÍA: Prensa Imperio Juniors.