Se realizaron las Reuniones Regionales de FeBAMBA
Con el objetivo de seguir fomentando el desarrollo del básquet en cada...
Midland tuvo un excelente 2017 con el equipó de Primera, llegando a la final de la Copa de Oro en la Conferencia Oeste, cayendo en tres juegos contra Universidad de La Matanza, quien terminó consiguiendo el bicampeonato. Tras esa actuación a lo largo de la temporada, la dirigencia funebrera decidió reforzar las expectativas, y ante la partida del entrenador Patricio Caris, contrató para esta a Daniel Malvicini, quien venía de coronarse con Tres de Febrero en la Copa de Plata Norte, participando del Final Four ganado por San Lorenzo.
Los de Libertad comenzaron anoche la segunda etapa del torneo, venciendo en un duro y áspero juego a San Miguel, dando un buen inicio en la zona Oeste 1.
«Un juego duró y difícil como lo esperábamos. El mérito fue defender fuerte y dejarlos en 59 a un equipo muy ofensivo. Allí estuvo la clave. A pesar de tener un equipo con gol en las manos, mi aporte es hacerlos más defensivos y parte de eso es presionar mucho al balón y estar siembre muy encima, no dejar pensar. La localia es fundamental más en esta etapa donde no hay revancha», expresa Daniel al mediodía siguiente de ese gran triunfo que le pone al equipo con las expectativas de poder colarse entre los primeros cuatro que clasifiquen a la Copa Metropolitana.
Menciona la defensa como virtud, y la pregunta es cómo consiguió transmitirle su impronta a un plantel integrado en su mayoría, por jugadores con mayores aptitudes ofensivas.
«Todavía no lo conseguí, estamos en camino. Son inteligentes y van viendo que la defensa los ayuda a ganar y con menos sufrimiento. Se van adaptando de la mano de los buenos resultados. Es un trabajo duro», responde.
Tras el trabajo en Tres de Febrero, su arribo al oeste.
«Un entrenador amigo me recomendó y se contactó Adrián Quiroga, quien es el referente dirigencial, y rápidamente nos pusimos de acuerdo. Adrián fue muy honesto en la propuesta y en el diagnóstico de la situación; yo venía de quedarme sin equipo luego de ser campeón, así que me pareció una oportunidad de colaborar en el crecimiento del básquet de Midland y una manera de tener continuidad laboral», afirma.
Sin dudas, el ponerse al mando de un equipo como Midland, le llevó a destacar virtudes de una institución netamente barrial.
«Me sorprendió la voluntad de todos, porque todo es a pulmón, ningún jugador cobra un peso; se mueven en transporte público y están comprometidos a full con la actividad. Desde limpiar la cancha a cuidar los materiales, se ve amor por la camiseta», señala.
Desde esa óptica, la consulta sobre cómo esos detalles lo motivan como entrenador.
«Me pongo objetivos a corto plazo, y hasta ahora se han ido cumpliendo. Son pequeños desafíos, el grande es aportar todo lo mejor de mi para poner el básquet de Midland lo más alto posible y tratar de dejar una estructura y organizacion de club grande. No se puede bajar los brazos al ver el compromiso de los demás», puntualiza.
Este inicio con victoria ante uno de los candidatos de la zona, ¿le permite soñar con poder instalarse entre los mejores treinta y dos de FeBAMBA, que pelearán en la Copa Metropolitana?
«Es el objetivo, es muy difícil pero veo unión detrás del objetivo y eso es más que importante. Ayer dimos un primer paso y ojalá podamos seguir por este camino», comenta.
Un detalle no menor con respecto al juego de anoche: todos los jugadores de su plantilla son mayores de edad, aunque la mayoría de ellos originarios de un momento donde Midland competía en niveles altos de la Federación. Actualmente, integra la Oeste en el Nivel 3. La consulta final es si dentro del proyecto traído a Libertad y consensuado con la dirigencia, está en trabajar mancomunadamente con las formativas, y en un mediano plazo, que algunos de ellos puedan integrar el equipo superior.
«Será una cuestión de tiempo. En formativas hay un gran trabajo de un equipo joven e identificado con el club. La prioridad es transmitir el compromiso y esfuerzo de los grandes, donde vean el ejemplo para que ellos trabajen con el objetivo de llegar a la primera de su club».
Daniel Mavicini, técnico de la Primera de Midland, quien en el comienzo de la segunda etapa, comenzó con un buen triunfo, ratificando lo bueno hecho a principios de año, y de manera inevitable, soñar en seguir progresando. Trabajan para ello.