Los Minis de UGAB dijeron presente en el Oeste

Los pequeños minis de UGAB llegan un rato antes del horario estipulado para disputar su primer partido de la superfecha, donde enfrentarán a Villa España de Berazategui. Se sientan junto a sus profesores, en un costado del Rancho Garden, en Ramos Mejía LTC. Prestan atención al cuarto final del cotejo entre el anfitrión y San Andrés, a quienes luego enfrentarán, pero las miradas y los sentidos están puestos en las nuevas disposiciones reglamentarias. Consultan, preguntan, repreguntan, y se los ve entusiasmados ante la posibilidad de utilizarlas en los cotejos que tendrán durante toda la jornada del feriado patrio.

«Este año arrancamos con el mini desde el mes de enero, poniendo mucho énfasis al desarrollo individual de los chicos, y por supuesto, el colectivo en base a eso. La idea de participar en esta fecha fue más que nada en buscar en fortalecer el grupo, donde son varios minis de la misma camada; también poder vivir la experiencia, a disfrutarla, a compartir un día lleno de básquet, ver equipos de otras conferencias. Pasar el día juntos y fortalecer sus vínculos, y dentro de la cancha, obviamente intentar exponer lo que se viene trabajando hace meses», expresa Pablo Zanikian, entrenador de los U12 de Unión General Armenia de Beneficiencia. El contacto para la charla se da en un alto de los cotejos, a la espera de su continuidad, mientras los niños de los cuatro equipos participantes desperdigan sus humanidades por todas las instalaciones de la entidad.

«El resultado siempre es anecdótico, lo importante es que los chicos se lleven algo, la experiencia de competir contra buenos equipos, y por sobre esos resultados, el equipo entender la importancia de mantenerse siempre unidos», agrega.

Pablo está con el mini de UGAB desde el 2012, donde comenzó como asistente monitor, y en 2014 fue llamado como entrenador principal.

«Recuerdo cuando era chico, salir en micro hacia José C. Paz, Victoria, Midland, y eran unos viajes fantásticos, donde se compartía mucho. Hoy está más regionalizado, y por eso estos eventos como el de hoy, le vienen bárbaro a ellos, así en cierta manera pueden experimentar esas sensaciones de juntarse temprano y salir hacia canchas de otras conferencias. Así conocen otros clubes que no enfrentan en toda la temporada, y otras zonas geográficas de la Metropolitana», señala al momento de referirse sobre los aspectos lindos de estos encuentros.

Por sobre las reglas permitidas, y la participación de un cuadrangular, la importancia del entrenador en inculcarle a sus jugadores en disfrutar estas actividades específicas, distintas a los sábados, donde toda la tira compite de modo formal.

«La idea de venir a Ramos, fue trabajar igual a como lo hacemos en la tira: que se olviden del resultado, aunque es inevitable eso, porque los chicos miran hacia arriba y se fijan en el tablero electrónico. Ellos deben salir a jugar, poner ganas, y a trabajar lo entrenado, porque asi será más fácil. Sobre esos aspectos, siempre la premisa de apoyar al compañero, más allá de los errores, porque para eso están; son chicos, entrenan para equivocarse. Al pasar los años, donde ojalá todos puedan seguir jugando, ir puliendo los márgenes de errores. Disfrutar de este deporte, porque a esta edad lo hacen, pero más adelante descubren otras cosas, y por eso, que les quede el mejor recuerdo del básquet», expresa el DT.

Con lo comentado, la opinión final acerca que desde estas categorías, sin dudas, emergen amistades que luego trascienden plenamente el deporte en si, y perduran toda la vida.

«Quienes jugamos al básquet lo sabemos; tuve la suerte de haber integrado una buena camada a nivel equipo en el club, hoy ya casi a los treinta años, ese grupo se sigue manteniendo, y disfrutamos afuera de las canchas tanto o mas como lo hacíamos adentro. El plan es ese, porque con los grupos fortalecidos permite trabajar mejor en la semana, y los chicos se aseguran, a nivel social, la amistad brindada por los clubes, la cual no es la misma de los colegios, u otros ámbitos. La de los clubes tienen otro sabor en la vida, y eso se disfruta el doble», responde.

UGAB puso su nombre en la primera fecha del Supermini. Y con su entrenador Pablo Zanikian a la cabeza, dijeron presente en el Oeste, aportando su cuota de color y calor.