Momento olímpico en Comunicaciones

La llama olímpica de los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018 se hizo presente el viernes por la tarde en las instalaciones del club Comunicaciones. La participación de la mayoría de las disciplinas que reúne diariamente a todos los socios fue un motivo más de orgullo para la institución que ha resurgido y hoy se encuentra en condiciones favorables de darle continuidad a su proyecto dentro del área metropolitana.

Más de una hora de visita de la llama olímpica de los próximos Juegos Olímpicos, que se desarrollarán a partir del 6 de octubre en Capital Federal y alrededores, le dieron una distinción absoluta al buen momento que vive Comunicaciones en su organización. Dentro del gimnasio de handball se generó la recepción de la llama en manos del remero olímpico Ariel Suárez, junto a la compañía de «Pandi», la mascota oficial de Buenos Aires 2018.

«Fue una jornada corta pero de mucho orgullo y emoción. Tuvimos una exhibición por parte de los chicos y las chicas de gimnasia rítmica de club durante el evento. Además, cada uno de los representantes de Comu tuvo la oportunidad de sacarte una foto con la llama olímpica. Nadie quiso perderse este momento único de la institución», explica Gustavo Pisos, secretario del área deportiva de Comunicaciones.

Comunicaciones sintió el calor olímpico en Agronomía. (Foto: Territorio Cartero)

Pisos transmite la alegría que tiene la comunidad que rodea a Comunicaciones luego de la crítica situación que debió pasar el club. «Lo más emocionante se dio con los miembros del órgano fiduciario y los socios, algo que no puede darse a menudo, donde se pueda hablar frente a todos los integrantes del club. Fue muy emotivo porque se rememoró toda la lucha que debimos pasar durante los últimos años. Es una gran felicidad que tenemos por el resurgimiento institucional que se manifestó en este desenlace de la situación que pasamos y la unión que hubo entre todos, con la llegada de la llama olímpica al club como excusa de privilegio», reconoce.

Por último, el secretario asegura que la buena voluntad de aquellos socios que componen al club diariamente les ha permitido tener una jornada plagada de sentimiento y motivos de orgullo por el trabajo hecho durante los años más complejos para la institución de Agronomía. «Es una repercusión interna sobre la unión de todos los socios y el crecimiento que se tuvo en poco tiempo».

FOTOGRAFÍA: Gentileza «Territorio Cartero»