Pablo Barrios y su trabajo en Estudiantil Porteño

Dejar la actividad profesional puede ser un golpe duro para cualquier deportista, especialmente para uno con la trayectoria de más de dos décadas que presenta Pablo Barrios. Mientras que algunos eligen un camino completamente ajeno a su anterior profesión, otros prefieren seguir ligados desde otros ámbitos.

La organización de FeBAMBA, con una inmensa oferta de clubes, categorías y competencias, representa una oportunidad perfecta para que el que busca, encuentre su lugar. Y en el caso de Barrios, ese lugar están siendo las inferiores del club Estudiantil Porteño, donde está dando sus primeros pasos como formador.

«Llegué al club hace dos años. Primero como jugador, después me fui a jugar la Liga y volví. Es un club que crece cada vez más, siempre con iniciativas, haciendo cosas. Hay cada vez más chicos. Yo ahora estoy trabajando como profe, como coordinador de Escuelita hasta U13 y tengo los Flex U15, U17 y U19. Hay una cantidad de chicos increíble. Cada vez que empezamos hay chicos nuevos», cuenta el pivote que supo pasar por Ben Hur, Peñarol, Atenas, El Nacional, La Unión y Libertad en la Liga Nacional de nuestro país.

«Después de tantos años de jugador profesional, 20 y pico de años jugando… la verdad que es algo increíble, el amor de los chicos que vienen, te abrazan. Es algo increíble. Una cosa es ser jugador y otra diferente es ser técnico o estar empezando a ser técnico. Cada cosa que hago, la aprendo. Estoy con profes muy buenos y siempre les digo lo mismo: yo puedo haber sido jugador, pero de ustedes aprendo muchísimo, porque están hace 15 o 20 años con el básquet de los chiquitos. Cada día aprendo más».

Dentro del trabajo de Barrios en el club se destaca la organización de un nuevo campus, que esta vez no solamente estará apuntado a los más chicos. «El próximo va a ser el cuarto campus que hago. Cuando vine por primera vez a Porteño por cuatro meses, Marcelo Belloni, que es el encargado del básquet, me decía que tenía que hacer un campus. Empezamos y la verdad que fue algo increíble. En los últimos hubo casi 70 chicos. Ahora vamos a hacer el cuarto, con dos días para chicos más grandes, que nunca lo hicimos todavía. Es una linda experiencia».

«El objetivo es que Porteño siga creciendo, porque eso le sirve a todos los clubes que están acá cerca también. Está bueno para todos. En mi caso quiero seguir aprendiendo y que las cosas vayan saliendo de a poco cada vez mejor», cierra Barrios, una de las tantas figuras de nuestro básquet nacional, que de una manera u otra, hoy se encuentran ligados a los clubes de FeBAMBA.