Gómez: ‘El punto más alto fue la unión del grupo’

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Actualizado: septiembre 27, 2019

El combinado femenino U17 de FeBAMBA se consagró campeón del Campeonato Argentino de Selecciones la semana pasada, tras vencer a San Luis, Neuquén, Chubut, Río Negro, Córdoba y Santa Fe en el partido final. El entrenador del equipo, Gonzalo Gómez, detalló cómo fue el camino del equipo hasta el título y cuáles fueron sus virtudes para quedarse con el campeonato nacional.

-¿Qué sensaciones te dejó el torneo que hicieron en Neuquén, incluyendo el título que obtuvieron? 

Si bien sabíamos que eramos uno de los candidatos, creo que nuestro rendimiento fue de menor a mayor. Nos tocó un camino donde no nos cruzamos con los otros equipos que suelen animar los campeonatos, como Mendoza, Entre Ríos o Santa Fe (hasta la final). Aún así, Córdoba nos hizo un gran juego en semifinales, pero pudimos reaccionar. La final la jugamos al 100%, todo lo que habíamos entrenado durante meses lo pudimos plasmar ahí. Las chicas defendieron con intensidad y se pasaron bien la pelota. Es una ventaja tener a 12 jugadoras que pueden tomar las riendas del equipo cuando sea necesario.

-¿Cómo fue el proceso de selección de jugadoras y qué características de juego buscaban plasmar en el equipo? 

El proceso fueron casi tres meses de entrenar los martes y jueves. Buscamos armar un equipo que reuniera las características de ser intenso en defensa y dinámico en ataque. Que cualquiera pueda tomar decisiones. Tal es el caso que, durante el torneo, tuvimos diferentes goleadoras. Creo que sólo en los primeros dos partidos se repitió la máxima anotadora. Los rivales no tenían que defender a una, sino a todas. La idea fue armar un equipo súper competitivo donde haya mucho más que individualidades.

-¿Cuáles creés que fueron los puntos altos del equipo durante el torneo? 

El punto más alto a rescatar fue la unión del grupo. Fue sensacional como estuvieron unidas en todo momento, desde antes del torneo. Les remarcamos siempre que son un grupo bárbaro, donde todas se llevan bien y no hay egoísmo. Si bien todas ellas tienen muchos minutos en sus clubes, y toman muchas decisiones importantes en cada partido, acá no les importó tener por momentos un papel secundario. Creo que esa fue la gran clave para hacer un gran torneo. En cuanto al juego, el punto más alto se vio en la final, a la hora de defender y ejecutar el plan de juego que pensamos para ganar.

-¿De qué manera creés que benefician estas experiencias a la formación y el desarrollo de las jugadoras? 

Estas experiencias son excelentes por muchas cosas. Como dije antes, a veces en los clubes hay una o dos jugadoras que toman muchas decisiones. Acá les tocó jugar para y por el equipo, resignar a veces ese protagonismo. Lo entendieron y lo hicieron bárbaro.

También, por momentos, se juega distinto a lo que se acostumbra en el torneo nuestro de AFMB. Es una competencia intensa. Más allá de que no todas las provincias tienen muchas jugadoras de gran talento, saben suplir eso con garra y esfuerzo. Nosotros nos pusimos en sintonía con el torneo en cada partido. Muchas veces se dieron circunstancias de juego que quizás acá no son frecuentes. Eso las hace crecer como jugadoras.