Germán Blazquez, el MVP del Torneo de eSports de FeBAMBA

Vélez se consagró campeón del primero torneo de eSports de FeBAMBA el pasado fin de semana, al derrotar a Lanús 66-58 tras caer 63-55 en el primer encuentro. La figura de ambos encuentros en el conjunto de Liniers fue el usuario Manteca233, autor de 25 y 27 puntos en los respectivos partidos por el campeonato. A continuación, el protagonista nos cuenta su historia ligada a los videojuegos y cómo fue que se unió al elenco del Fortín.

-Primero, ¿Cuál es tu verdadero nombre? ¿Cómo es tu historia ligada al básquet y los deportes virtuales?

Mi nombre es German Blazquez. Si bien el Basquet es uno de mis deportes favoritos no lo practique nunca a nivel profesional, sólo con amigos. Si jugué profesionalmente al fútbol en varios clubes del ascenso (Talleres de Remedios de Escalada , Cambaceres y La UTA). Empecé a jugar videojuegos hace bastante (tengo 38 años). Creo que jugué toda la saga 2k. Un hobbie que tuve desde chico eran los videojuegos, en especial los de deportes: básquet, fútbol y fútbol americano. Pero en sí creo que llevo mas 20 años jugando al 2k, el primero que salió fue en el 2000 si no me equivoco.

-¿Cómo fue que conociste a tus compañeros?

Conocí a mis compañeros de equipo en un grupo de WhatsApp. El estar tanto tiempo encerrado por la pandemia nos permitió jugar más tiempo juntos. Ahí comenzamos a jugar un modo de juego que se llama “My Park” sería un Básquet callejero de 3×3 o dos contra dos. El grupo se fue agrandando y decidimos saltar al modo ProAM que es 5 vs. 5. Al principio perdíamos todos los partidos y de a poco nos fuimos perfeccionando. La clave fue averiguar cuáles eran las builds adecuadas para cada posición y lo que tenía que hacer cada jugador. Empezamos a entrenar todos los días con horarios fijos y ahí mejoramos muchísimo a tal punto que tenemos cuatro jugadores preseleccionados para el próximo FIBA Open.

-¿Cómo fue que llegaron a representar a Vélez?

El verdadero nombre del equipo es MobyDick eSports. Llegamos a un acuerdo con el Club Atlético Vélez Sarsfield para representarlos en los torneos de SPL y FeBAMBA. El vínculo finalizó después de la final, ahora con los chicos estamos analizando nuevas propuestas.

¿Cuál es tu posición y rol en el equipo?

Ocupo la posición de base. Mi función es manejar las ofensivas del equipo y tratar de juntar marcas para crear situaciones favorables.

-¿Cómo se prepararon para el torneo? ¿Qué te pareció el rendimiento del equipo en el mismo?

La preparación fue muy buena, rozando lo profesional. Veníamos entrenando de lunes a viernes, jugando muchos partidos. Eso nos permitió entrar al campeonato con mucho ritmo y rodaje.
El rendimiento fue muy bueno también. Nos tocó la zona de la muerte porque estábamos con Los Andes, que estaba reforzado con tres jugadores de la Selección Argentina, y con Argentinos Juniors que también tenía uno. Sabíamos que el equipo que pasara a la próxima fase iba a ser uno de los favoritos a ganar el campeonato. En los playoffs nos tocaron llaves muy parejas. Nunca nos relajamos y tuvimos actuaciones muy buenas. Lucho con los rebotes y los picks , Tobi defendiendo siempre al mejor jugador del otro equipo, Bruno haciendo de todo, Facu y Lea certeros con los tiros desde las esquinas y Truly que fue nuestro refuerzo de lujo para este campeonato, la rompió en la fase de grupos.

Quiero agradecer a FeBAMBA por la gran organización que hicieron. No es fácil llevar a cabo un torneo de 40 equipos- Todo esto conlleva mucho tiempo en armado y planificación. Espero que este torneo haya sido el primero de muchos.

-¿Cómo vivieron las Finales con Lanús y qué ajustes hicieron para dar vuelta la serie en el segundo partido? ¿Eran conscientes que habían ganado cuando terminó o no sabían que la regla de desempate los favorecía?

Antes que nada quiero felicitar a Lanús por el gran campeonato que hicieron. La final fue muy difícil porque no teníamos ninguna referencia de quiénes jugaban y cómo jugaban. El primer partido cometimos el error de entrar a jugar como si fuera un partido más, y ellos jugaron una verdadera final, como tiene que ser. Nos sorprendieron con el pivote tirador, no llegamos a ajustar a tiempo y terminamos perdiendo. En el segundo partido ajustamos en defensa pero más que nada cambiamos la actitud y fuimos más agresivos a tal punto que en el primer cuarto sacamos una amplia diferencia, que creo que fue de 15 puntos. Después Lanús hizo su trabajo y se metió nuevamente en partido, el final fue no apto para cardíacos.

Sinceramente pensamos que la diferencia no nos alcanzaba para quedarnos con el
título. A las dos horas de terminado el partido me enteré que éramos campeones. El sistema de desempate nos terminó favoreciendo. Final más emotivo, imposible.