Aquel plantel de Capital Federal Campeón 1994

El 60° campeonato Argentino de Mayores tuvo a Capital Federal como campeón, alcanzando un título que le venía siendo esquivo durante nueve años consecutivos y de la mano de un plantel muy joven,  integrado por jugadores que militaban en clubes de la Federación Regional de Capital Federal (FeBAMBA),  pudo dar el zarpazo y quedarse con un sorpresivo campeonato.

La gesta tuvo lugar en Corrientes y el ordenamiento táctico de ese equipo estuvo comandado por la dupla Heriberto Schonwies y Carlos Ballester, quienes optaron por trabajar fuerte en la preparación de un equipo, que tenga como principal argumento, la ambición, el “hambre” de ganar y sobreponerse a otras selecciones que sí contaban con jugadores de Liga Nacional y partían como candidatos como Tucumán, que entre sus filas tenía la experiencia y jerarquía del  “Negro” Carlos Romano y un desfachatado, Lucas Victoriano, quien ya asomaba como una futura estrella del básquetbol argentino.

Para conocer un poco más de la intimidad de aquel conjunto porteño, el departamento de prensa acudió al encuentro con uno de los protagonistas de esa plantilla, Marcelo Perella, legendario jugador de los torneos de la Federación de la décadas 80 y 90.

El Archi vistió muchas camisetas en su carrera como basquetbolista, pero en esta nota dejó en claro su sentimiento por integrar la selección porteña: “Vestir la camiseta de la selección me generaba lo máximo, un gran compromiso, muchas jugadores quizás aspiraban a jugar en otros equipos más importantes, pero para mí era lo más lindo y lo que más esperaba durante el año”.

El elenco capitalino se quedó con aquel torneo demostrando grandes rendimientos y sobre todo ganando una final durísima ante Buenos Aires, reeditando una vez el clásico de los campeonatos argentinos de aquellos tiempos. “Se formó un grupo humano bárbaro”, comenzó diciendo Perella, a la hora de reflexionar las razones por la cuales se logró aquel objetivo.

“Tuvimos una preparación muy buena, rápidamente se pudo formar una buena química porque jugamos todo en equipos de la Federación y nos conocíamos por ser compañeros o de habernos enfrentados muchas veces”, agregó el pivote sobre lo que fueron los primeros pasos de ese seleccionado.

Más allá del logro y de haber cortado las redes correntinas, Perella manifestó que “fue un torneo hermoso en todo sentido, la pasamos muy bien tanto dentro como fuera de la cancha.

También ponderó la conducción de la dupla técnica Ballester-Schonwies, manifestando: “Cada uno sabía el rol que tenía que cumplir y lo hacía a raja tabla, nos hicimos de abajo, trabajando duro, luchando y entrenando para estar a la altura de la competencia. Con esfuerzo lo logramos y pudimos conseguir el título”.

Jugar en el interior en este tipo de competencias, no suele ser nada fácil y más para el combinado porteño, que por lo general suele ser bien visitante en este tipo de ocasiones. Sin embargo en desmedro de esta situación, Perella advirtió: “Nos trataron bárbaro toda la semana, sin ningún clima hostil. El partido más duro y áspero fue la final contra Buenos Aires, con roces normales del juego, pero en realidad fue una gran torneo, lindo de ver y de jugar”.

El básquet marca caminos, carreras, en muchos jugadores y más en aquellos que tuvieron la chance de salir campeones, alcanzando un recuerdo imborrable para su memoria deportiva. Para todos los integrantes del plantel campeón de 1994, hay mucho de esto, sabiendo que el gran grupo humano que se formó en Corrientes, perdurará en sus anécdotas y vivencias como las que relató Marcelo Perella en esta nota y revivió una de las últimas alegrías porteñas en los Argentinos de Mayores.

PLANTEL CAMPEÓN DEL ARGENTINO EN 1994