Un año en el que FeBAMBA mostró su lado solidario

El 2020 fue un año diferente para todos y FeBAMBA no fue la excepción. A partir de la llegada del COVID-19 a nuestro país por el mes de marzo y con la suspensión de las diferentes actividades deportivas y sociales, los clubes y la propia Federación tuvieron que adaptarse a una nueva realidad en todos los ámbitos imaginables.

Pero así como lamentablemente el calendario basquetbolístico no pudo llevarse a cabo con normalidad, la pandemia puso en escena otro aspecto fundamental del rol de los clubes en el día a día: el solidario.

El trabajo de cada institución para poner su granito de arena en este contexto tan difícil fue notable. Desde aquellos que prestaron sus instalaciones para la colocación de camas para recibir a quienes necesitaban estar aislados, a otros que ante la elevada demanda en los hospitales y clínicas, colaboraron para diferentes campañas de vacunación y extracción de sangre.

«En el club se instalaron 200 camas para aislamiento y como nosotros tenemos algunas aulas, también serían unas 30 camas más para espacios familiares de aislamiento, en el caso de que haya que aislar a una familia completa. Nosotros brindamos las instalaciones para eso, con el Municipio acondicionando nuestros diferentes espacios para ser utilizados«, nos contaba Cinthia Nikolov algunos meses atrás, presidenta del Deportivo San Andrés, una de las afiliadas que prestó sus instalaciones durante el 2020.

Vimos también otros tipos de esfuerzos solidarios de parte de los clubes: rifas, sorteos, donaciones de viandas de comidas, ollas populares, barbijos y mucho más. Todos posibles gracias al enorme trabajo y dedicación de los integrantes de cada una de las instituciones, quienes entendieron cuál era la función principal de estas durante el 2020.

Por estas horas, y de acuerdo al pedido voluntario de parte del Ministerio de Salud, los clubes también podrán empezar a colaborar en la campaña de vacunación contra el COVID-19, ayudando en dos puntos básicos (ver más información aquí):

– Recursos para apoyo de los equipos en el proceso de vacunación (etapa previa, durante y post-vacunación).
– Difusión y divulgación de información.

Mientras todos esperamos recuperar en este nuevo año una cierta normalidad, es importante no solo mantener todo el trabajo hecho hasta el momento, sino también seguir colaborando para poder atravesar este escenario lo más pronto posible.