Los chicos son felices con la Primera

Cuando esta noche llegue hasta su cancha el único invicto que queda en el Torneo Superior, San Miguel repetirá un lindo ritual que mantiene con los chicos de su minibásquet. Desde las 21.30 horas será anfitrión de Gimnasia de Lomas, por la octava fecha de la Copa Metropolitana, y en el calentamiento precompetitivo, como viene sucediendo en estos meses, algunos chicos que juegan en la entidad del oeste en los U12 y U13 estarán junto a los protagonistas de la Primera.

«Intentamos que los chicos estén mas cerca de los jugadores de Primera, que se sientan mas identificados con ellos y el club, mas allá de los resultados. También lo aplicamos como estrategia para acercar a las familias a presenciar los cotejos. Que cada uno sienta un rol de protagonismo y pueda ser beneficioso para el club; esa es nuestra visión como entrenadors», explica Leonardo Markiewicz, director técnico del Superior y coordinador general de la actividad en la entidad.

Cuando se lo consulta sobre como tomaron los jugadores mayores esta iniciativa, dice sin vueltas:

«Al principio costó un poco, en el sentido que ellos en la entrada en calor están enfocados en lo suyo, poner en foco la atención en el partido; pero a medida que fueron pasando los encuentros, fue mas fluida y natural, corrigiendo algunos chicos, algunos quizás más introvertidos y les hizo muy bien salir del círculo de sus amigos de equipo más cercanos e involucrarse con los mayores. Estos comprendieron el propósito, y se fue dando de una manera no tan estipulada o estructurada, sin alejarnos del objetivo. Si bien nos gusta ganar como a todos, pero tenemos en claro que es un recorte y la consecuencia de un trabajo en conjunto y continuo. Como te dije, al principio los desacomodó un poco, lo cual era obvio porque cada uno de ellos tiene sus espacios y rituales de concentración; pero lo realizamos ya hace bastante, seguimos y es el punto de partida para fortalecer en ellos el sentido de pertenencia, un compromiso con el club»

A su vez, Facundo Nuñez, responsable del Minibas´quet junto a Alberto Filliol, cuenta cómo surgió la idea:

«Surgió de un jugador de la Primera que se incorporó este año; él lo vio en el equipo donde jugaba, para la Liga Zárate_Campana. Me lo comentó, me pareció genial, lo transmití a Leo y Beto y de inmediato lo implementamos. Al principio fue un poco complicado, porque los mayores debieron adaptarse, pero entendieron que  el objetivo era compartir con los mas chicos esa experiencia de estar involucrados con jugadores profesionales a quienes ven como referentes del club. Empezamos, buscamos el número de participantes, y así fue que de tres a cinco niños sean parte de ese momento y rotan en cada encuentro donde somos locales de acuerdo a méritos no solo deportivos, sino de comportamiento, de sus responsabilidades al entrenar y otros factores. Obviamente todos pasarán por esa experiencia».

Desde su rol de entrenador de los chicos, se le pregunta cuáles son las reacciones que ve en ellos cuando participan de la entrada en calor con la Primera.

«Se motivaron con la idea, y nos sirve para acercar a las familias porque como deben traerlo los padres, ese día muy probablemente se queden a ver el partido. de a poco generamos una expectativa, lo comentan en los entrenamientos. La iniciativa está muy buena, no es una locura ni algo extraordinario, pero sin dudas nos suma y aporta al trabajo que realizamos en el club. Sabemos que se torna más difícil lograr ese compromiso no solo en los chicos sino en los padres; cada vez cuesta más y por eso redoblamos los esfuerzos para potenciarlo de la mejor manera».

Al momento de hablar sobre la actualidad del minibásquet en San Miguel, Facundo brinda un panorama:

«Tenemos muchos chicos, estamos bien en ese aspecto, y nos permite presentar dos tiras. En un contexto económico difícil, la captación es difícil, sumado a la cuestión cultural que están cada vez más sedentarios, la mayoría de los padres no se involucran tanto. Por la infraestructura que poseemos, al tener esa cantidad a veces se nos colapsa en los entrenamientos, pero somos tres profesores y está en nosotros saber capitalizar lo positivo de eso y no resignemos la calidad en las prácticas. A nivel competitivo, como todo siempre depende de las camadas pero no podemos quejarnos; estamos en progreso».

San Miguel instauró una linda novedad para sus chicos, y éstos disfrutan la posibilidad de al menos por un ratito, compartir rectángulo con aquellos a quien ven como reflejos y desean emular para un día no tan lejano, estén en sus lugares.