Se realizaron las Reuniones Regionales de FeBAMBA
Con el objetivo de seguir fomentando el desarrollo del básquet en cada...
Crovara participa por segunda vez del Torneo Prefederal, lugar conseguido por haberse consagrado campeón de la Copa Metropolitana, tras vencer en la final del 2016 a Náutico Hacoaj. Con esa base de jugadores, junto a otros refuerzos, pelea por la clasificación a cuartos de final. Este domingo visita al líder Los Indios, y a falta de dos fechas, solamente Ateneo Popular Versailles puede arrebatarle ese lugar, quien lo sigue a dos puntos.
Uno de los que integra el conjunto de Néstor Smutniak es Leandro Barreiro, quien llegó a la entidad de Villa Madero y fue parte de los dos grandes logros: el acceso a semifinales en 2015 luego de dejar en el camino a un Independiente candidato, y la Metropolitana. Con pasado en las formativas, luego tuvo su trayectoria por José Hernández y Pedro Echague antes de regresar.
Antes del viaje a Moreno, habló con Prensa y la primera opinión refirió a la caída de local contra Institución Sarmiento.
«Sabíamos del poder ofensivo de ellos y necesitábamos contrarrestarlo, por eso planteamos el partido desde una defensa agresiva e intentar controlar el uno contra uno porque poseen jugadores muy desequilibrantes. Se hizo un encuentro muy parejo y realmente pudo haber sido para cualquiera, pero bueno, le tocó a ellos, supieron cerrarlo mejor…», comenta este jugador polifuncional y uno de los más ponderados por el entrenador.
Si aún no pudo sellar el pase a la instancia de eliminación directa, parte tuvo que ver esa seguidillas de derrotas en la mitad del campeonato. Leandro coincide:
«Nos costó adaptarnos a la llegada de varios jugadores nuevos, y lo pagamos en ese momento. Matías Paciotti, Maxi Segón y Gabriel Pires nos dieron un salto de calidad pero nos costó encontrar cual era nuestro rol en el equipo y qué podíamos dar. Si bien nos costó tres derrotas consecutivas seguimos tranquilos porque si trabajábamos íbamos a levantar y eso efectivamente sucedió».
Luego de esa cadena negativa, llegaron seis triunfos, algunos en escenarios complicados; allí fue cuando Crovara dijo presente y se mostró como un rival duro para el resto de la zona 1.
«Sin dudas el partido en Versailles nos levantó mucho por ser una cancha muy difícil; si bien no jugamos nuestro mejor básquet, la actitud defensiva cambió y eso nos ayudó a ser otros. Nos dimos cuenta que planteando los cotejos de atrás para adelante, siendo agresivos en defensa, las conversiones nos llegan luego más fáciles porque cualquiera de nosotros tiene capacidad de anotación. Monte Grande también muy complicado; estábamos veinte puntos abajo pero en el segundo tiempo logramos cambiar la actitud y por suerte nos quedamos con un cotejo muy valioso, porque ellos nos habían ganado en nuestra casa del mimo modo, en la última bola», expresa.
Viene Los Indios este domingo, uno de los máximos candidatos a lograr el título.
«Sabemos lo que implica ir a Moreno, la calidad de sus jugadores y una localía pesada; pero confiamos en las armas que tenemos y en el potencial a dar. Igualmente, todos los rivales son muy parejos, los partidos son batallas y contra Los Indios esperamos algo similar, áspero y cerrado. Ojalá sea para nosotros», dice Barreiro, con un pasado que lo involucra muchos años en Hernández, cuatro en Echague, y un Federal para Independiente y en la entidad de Mataderos. Es el tercero de cuatro hermanos y convive con su mujer Jazmín, quien lleva en su vientre a Manuela, con fecha de parto en septiembre.
«Leandro es un gran jugador, siempre lo hace en función de ayudar al equipo; tiene perfil bajo pero siempre suma en los números. Puede defender el perímetro, a un interno, es rebotero en los dos aros. Me ha jugado de 1, 2, 3 y de 4; técnicamente es bueno y entiende el básquet perfectamente. Tiene una contextura física que le permite ser versátil, mide 1,92, flaco, brazos largos, buena capacidad de salto, mucha fuerza y le añade muchas ganas de entrenar». Las palabras que lo describen pertenecen a su técnico Smutniak y son el reflejo de como lo tiene en plena consideración al instante de diseñar los sistemas. Cuando Paciotti estuvo de vacaciones, Leandro tomó la base por tres encuentros, como ejemplo cabal de lo expresado por el Polaco.
Es el actual monarca en el certamen metropolitano, y sobre eso expresa:
«Lo del año pasado, por como se dio, fue soñado, porque se trató de mi primer campeonato, y era algo que se me venía negando hace mucho. Jugué varias finales pero no conseguí ninguna; y en esta tuvo el plus de haberlo conseguido con amigos de toda la vida. Eso es impagable». Y menciona a Patricio Argento, Mariano Castelo, Emiliano Mazzucco, Tomás Buosi, el Cholo Argento y Sebastián Burgos. «A eso sumale que el Polaco nos conoce de chicos, por lo que todo resultó una sensación increíble», admite.
Si bien el pase a cuartos está complicado porque el fixture indica a los dos de arriba, Barreiro asegura estar junto a sus compañeros muy tranquilos.
«Hemos conseguido una experiencia tanto en definiciones como playoffs que nos llevan a no perder la calma y seguir confiando plenamente en nosotros», asegura.
Leandro Barreiro, el polifuncional con el que Deportivo Crovara cuenta dentro de una plantilla rica para afrontar estas dos fechas finales y poder acceder a los cruces de eliminación directa. Y como afirma, allí ya es otro campeonato.