Primer encuentro de Camadas en Morón

En la mañana del domingo 19, se llevó a cabo en las instalaciones del Club Morón, un encuentro de Camadas, con el propósito que las viejas glorias de la entidad disfrutaran de unas horas jugando al básquet entre ellos y con los jóvenes que defienden actualmente los colores del Halcón.

«Lo pensamos con algunos chicos que están jugando Maxi; la idea es poder acercar al socio/ex jugador, que vivió su formación como jugador acá, si hoy no está ligado  al club, pueda acercarse y juntarse con esos ex compañeros que conoce. Divertirnos, volver a estar juntos en una cancha», expresó Jorge Plez, coordinador en la entidad de Castelar, lo días previos al evento.

Junto al torneo, se realizó luego un almuerzo entre lo presentes, donde las anécdotas estuvieron a la orden del día, rememorando viejas hazañas, ante la atenta mirada de los jóvenes que en este momento se preparan para afrontar los playoffs del Nivel 1 en Conferencia Oeste, donde Morón estableció una marcada diferencia con el resto de lo competidores.

«Pensamos la actividad en función de la familia, donde el hijo que nunca vio al padre dentro de una cancha, o la mujer que lo conoció luego de su etapa como jugador, pudieran ser testigos de verlo con la camiseta del club de su infancia y adolescencia», agrega Plez.

Desde el 2016, Morón trabaja bajo el proyecto «Los Pibes del Club queremos jugar», y con esa consigna, este evento se enmarca dentro del mismo; buscando que los jóvenes vean a aquellos que décadas atrás entrenaban y jugaban en las formativas con el sueño de un día ser integrantes de la Primera.

«Claramente buscamos eso, porque los chicos de hoy no conocen la historia de Morón, que es muy rica en el básquet. No solo no vieron a esos referentes, hasta dudo que hayan llegado a observar a quienes actualmente integran el equipo de Maxi. Tenemos los casos de Oscar Ferrari y Marcos Alonso, quienes jugaron Liga Nacional y TNA, el mismo Benjamín Pereyra, que comparte con ellos el plantel superior. Hay lindos valores para que ellos puedan verlo, incluso estamos pensando en un programa de mentores, a desarrollar en el 2018. Que esos jugadores representantivos de Morón, puedan trabajar con los jugadores que se están formando; transmitirles su experiencia, vivencias, todo lo demás», comenta el entrenador de, además, una Primera que el viernes consiguió el pasaje a las semifinales de su zona en la Copa Metropolitana.

Dentro de la historia rica embargada por el club ubicado en la calle Bernardo de Yrigoyen, imposible dejar de soslayar que en ese rectángulo se disputó el primer partido de Liga Nacional, entre el anfitrión y San Lorenzo, actual bicampeón.

«A mi, en lo personal, me tocó estar esa noche presente, siendo un premini de 10 años. Y la seguí bastante. Hoy es muy fuerte cuando decís que Club Morón jugó Liga Nacional, parece una cosa inalcanzable, pero tuvimos la oportunidad de inscribir nuestro nombre. Jugaban Gregory Silder, el Vasco Aispurúa, Alejandro Casettai; incluso nuestro presidente actual estuvo en la banca de ese plantel, siendo menor. Buscamos que esa mística se traslade a nuestros jóvenes», admite Jorge.

La idea, luego de la hermosa experiencia, es poder repetirla cada año, para fortalecer el sentido de pertenencia e identidad entre los lazos de aquellas glorias del club con quienes suelan con escribir la propia,