Victoria Llorente prepara su regreso a las canchas

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Actualizado: diciembre 9, 2017

Victoria Llorente estaba jugando la gira preparatoria de la AmeriCup en Bielorrusia, donde enfrentaban al local y Gran Bretaña. Justamente, restando cinco minutos para culminar el juego ante las anfitrionas, se lesionó.

«Me rompí el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Una vez que volvimos a Argentina me llevaron directo a hacer resonancia y ahí fue cuando me dieron la noticia de la gravedad de mi lesión. Sabía que tenía por delante una cirugía y seis meses de recuperación, pero sabía que esto no iba a ser una traba en mi carrera, e iba a poder superarlo y a volver más fuerte. Y hoy después de tanto trabajo y esfuerzo, faltando menos de veinte días para cumplir esos seis meses, puedo decirte que nada es imposible si te lo propones», expresa Vicky desde su casa, el día después de participar en un Campus. Con respecto al Lointek Gernika Bizkaia, el equipo de España donde juega desde el 2015, dice:

«Me bancaron y fueron claros:  esperarían a recuperarme bien y cuando estuviera lista volviera; por eso es que a principios de enero voy a reincorporarme al equipo, para de a poco poder insertarme en la competencia nuevamente. Gernika actualmente está en competencia desde octubre, así que llegaré y me inserto al trabajo que ellas ya vienen haciendo, no es una pre temporada».

La ala pivot, de 1,85, se inició en este deporte a los seis años en Lanús, donde jugó siempre hasta emigrar a la península ibérica, salvo en 2012, cuando recaló una temporada en Vélez Sársfield. En el 2009, con apenas trece, fue llamada a la Selección Argentina, quien estaba armando su equipo de la categoría U15. Siempre activa, lo complicado de una lesión de estas características la llevó a adaptarse a bastante tiempo libre.

«Al principio fue difícil; como todo cambio tuvo su crisis, pero bueno, de a poco fuí aceptando que mi lesión  ya había pasado y que ahora tenía que acostumbrarme y acomodarme a ella y a lo que eso conllevaba. Hubo muchas personas que me acompañaron en ese proceso y facilitaron para no ser un cambio tan brusco; mi familia principalmente.
Cuando peor lo pasé, la verdad, fue cuando tuve que estar en mi casa haciendo reposo y sin poder moverme de la cama. Más allá de ser una deportista profesional acostumbrada a entrenar muchísimo, soy una persona que no puede quedarse quieta, soy muy activa. Entonces era el doble de difícil hacer ese reposo obligatorio; pero bueno lo tome como algo inevitable, si quería recuperarme bien», admite.

En tanto ya quedan dos semanas para regresar, y disputar su tercera temporada, se le pregunta cómo fue la experiencia previa en España, hasta el instante de Bielorrusia.

«La verdad, jugar en Europa y más en Liga A1 fue un cambio increíble en mi, como jugadora principalmente, pero también como persona. Tenía 18 años cuando me subí al avión yéndome a jugar a España. La competencia allá es muy alta, la liga donde juego es muy competitiva y es un nivel de básquet muy bueno. Las semanas allá, las afrontábamos así: doble entrenamiento los martes, jueves y viernes; los lunes entrenábamos solo por la mañana, los miércoles era nuestro día libre y los sábados teníamos partido. Al tener tanta exigencia física y carga horaria, no había mucho tiempo para ir a conocer. Pero bueno, los alrededores de Gernika como Bilbao, San Sebastián que son de las ciudades más turísticas cerca de ahí, si tuve la oportunidad de ir a conocer», expresa Victoria.

Con su retorno, no solo la posibilidad de pertenecer a una Liga poderosa, sino también el tomar un ritmo de competencia donde en su progreso esté a la vista en el horizonte su participación en la Selección.

«Voy con las expectativas de, primero antes que nada, poder afrontar bien los entrenamientos con todo el equipo, que la rodilla responda bien, y yo sentirme bien físicamente; estoy entrenando mucho acá para hacer que eso sea lo más fácil posible cuando vaya. Y luego a medida que vayan pasando los entrenamientos poder ir siendo cada vez más competitiva y poder ayudar a mi equipo necesite. Después claro, tengo en la mira el mundial; si bien falta tiempo, creo que el trabajo para poder llegar de la mejor manera al Mundial, no va a ser un mes antes, sino el trabajo de cada jugadora todos los días por mejorar individualmente. Si mejora cada una e intenta lograr la mejor versión de sí, cuando nos volvamos a juntar en la pre selección rumbo al Mundial, el equipo va a ser mejor y más competitivo», asegura.

Junto al básquet, se la consulta sobre si antes de viajar al Viejo Continente, estudiaba, y si fue así, lo puso en impasse.

«Había iniciado ese 2015 en la Universidad de Lanús la carrera de Licemciatura en Turismo y cuando me salió la oferta para irme para España tuve que dejarla. Después estando allá empecé a estudiar la misma carrera en una universidad a distancia y ahora aproveche este tiempo que estuve acá por la lesión para seguir metiendo materias de la misma carrera de Turismo. Más allá de ser jugadora profesional de básquet, siempre tuve claro que quiero recibirme y tener la carrera de Turismo hecha para mi futuro», afirma.

La nota entre la jugadora y el cronista se da en el marco del primer juego semifinal del Super XII, entre Obras y Lanús. El escenario es propicio entonces para pedirle una opinión sobre la actualidad de esta actividad en el país.

«El básquet femenino de Argentina este último tiempo está creciendo mucho; si bien todavía creo que nos falta, se vienen logrando cosas muy importantes. Sin ir tan lejos, el haber salido medalla de plata en la Americup, habiendo hecho tan buen papel, y a pesar de todas las adversidades, creo que habla por sí solo de lo que se está logrando. Potencial está más que claro que hay, jugadoras hay. Creo que para lograr crecer cada vez más y llegar todavía más lejos, tiene que haber un compromiso de todos, no sólo de la CABB, como ya lo viene haciendo, sino de cada club, de cada dirigente, de cada jugadora, todos mejorando, y comprometidos por una misma causa, mejorar el básquet femenino en la Argentina. Si crece la competencia interna, sin dudas va a mejorar el nivel de Argentina al salir al exterior. Dos grandes logros también que quiero destacar son la Liga Femenina que se empezó a jugar este año con un nivel muy competitivo, incluyendo jugadoras extranjeras en la competencia y los clubes asumiendo el compromiso e intentando ser lo más profesionales posible. Y el hecho de sumar más jugadoras al exterior es otro indicio de querer evolucionar y así va a ser como crecerá todo el básquet femenino»

Victoria Llorente ya se recuperó de una grave lesión, y en pocos días viajará para incorporarse a su club de España. Desde allí, no solo prepara su regreso profesional, sino le dará sustento a sus ganas y anhelos por vestir nuevamente la camiseta de la selección nacional.

FOTOGRAFÍA: Fernando Sánchez para Prensa FeBAMBA