Se realizaron las Reuniones Regionales de FeBAMBA
Con el objetivo de seguir fomentando el desarrollo del básquet en cada...
Los minutos previos a Gimnasia y Esgrima de Villa del Parque (GEVP) y Gimnasia y Esgrima de Lomas dejaron en claro que los cánticos, el calor y el color de las tribunas iba a ser uno de los valores agregados del partido definitorio del Supermini de la Federación de Básquetbol del Área Metropolitana de Buenos Aires (FeBAMBA).
Y durante todo el encuentro, que tuvo como protagonistas a los más pequeños, las canciones fueron y volvieron entre la cabecera copada por la gente de Lomas y la tribuna central en la que se alojaron los de Villa del Parque.
Justamente el conjunto de la Ciudad Autónoma se topó con una bandera especial en la que el abuelo de uno de los nenes les agradecía por lo «conseguido» y por debajo se veía la sigla de la institución, mientras que en la parte baja flameaba una con «GEVP» y el fondo celeste, al tiempo que de espaldas al aro se leía «Lomas» y el escudo del club de la zona sur.
«Yo soy de Lomas, es un sentimiento, no puedo parar», bajaba desde el costado de Lomas cuando quedaba 1.41 minutos para el cierre del primer tiempo y su equipo caía por 22 a 18, en un desarrollo parejo y atrayente.
En la vereda de enfrente, Javier Infantino, padre de uno de los nenes de GEVP, realzó la experiencia para los chicos y lo calificó como «algo único» y remarcó la importancia de «divertirse» dentro de la cancha.
Agustín, su nene, recibió el consejo de pasarla «bien» y de que siempre recuerde que con los compañeros es «importante» pasarla bien.
En la misma línea, Julián Macetti, papá de Santino, contó que la semana se vivió con «un poco de nervios» propios de la competencia y también que desde el club le pidieron que la pasen «lindo».
A lo largo del descanso de cinco minutos, los mates y las sonrisas pasaron por las dos tribunas. Además, las mascotas de FeBAMBA levantaron a los hinchas presentes, que se divirtieron tanto como sus hijos con la pelota de básquetbol.