Se realizaron las Reuniones Regionales de FeBAMBA
Con el objetivo de seguir fomentando el desarrollo del básquet en cada...
El Club Águilas BB es un equipo que se creó en Pozo Hondo, ciudad situada a poco más de 80 kilómetros de la capital de la Provincia de Santiago del Estero. Con la humildad y el trabajo se formó este club de entusiastas del básquet, que le dan la posibilidad de disfrutar un momento de diversión a los chicos de la zona.
Alejandro Albornoz, uno de los principales impulsores de la actividad en su pueblo, reflejó su felicidad por haber podido traer de nuevo a las Águilas al Encuentro del Minibásquet: «Ha sido una experiencia muy linda. Tuvimos la posibilidad de conocer lugares de Buenos Aires como la cancha de Boca y de River, que para todos nosotros que somos del interior es algo inolvidable. Además fuimos el único equipo que representó a la provincia de Santiago y eso nos llena de orgullo».
Esta no es la primera vez que las Águilas son parte del Encuentro, pero no deja de ser una jornada diferente, que vuelve a sorprender y alegrar a los más jóvenes: «Lo que más les sorprendió fue la enorme cantidad de chicos que hubo este año en Platense. Dabas vuelta a la cancha y estaba toda llena de niños de todos los equipos y de muchos lugares diferentes». Además, agradeció a la organización por la invitación: «Quedamos muy contentos con toda FeBAMBA, quiero agradecer a la señora Alicia Vexina y a la Federación por todo lo que han hecho. Es un trabajo muy bueno el que hacen porque no es fácil recibir a tantos chicos y gracias a dios salió todo muy bien».
Lo que están logrando las Águilas de Pozo Hondo, con la difusión del deporte no pasa desapercibido y es algo que motiva a Alejandro y a toda la Provincia: «Está ya es la segunda vez que viajamos para el Encuentro en Buenos Aires y por suerte el básquet se está contagiando aquí en Santiago. La gente empezó a preguntar qué es FeBAMBA, cómo se puede participar, y se están sumando, que es algo muy bueno para el club. Que las Águilas se hayan animado motiva al resto de la provincia, que quizás está en un momento de calma, a mover a los chicos, que viajen. Ya han pasado varios días desde nuestra vuelta y los chicos siguen preguntando, contándole a todo el mundo lo que vivieron, y así van a estar por un buen tiempo».
Este año fueron recibidos por el Club San Andrés, y Alejandro nos explicó lo que vivieron y lo que se viene en esta nueva amistad: «Nos recibieron de la mejor manera, todos son excelentes personas y las familias fueron muy amigables. Los chicos hicieron la experiencia de ir a dormir a la casa de sus compañeros. El 17 y 18 de noviembre nos van a visitar los chicos de San Andrés. Así que estamos todos algo revolucionados, acondicionando lo que se pueda y programando las actividades para sacarlos un poco de la rutina y el ruido que tienen en Buenos Aires». Por eso, Albornoz anticipa que «Acá no se van a encontrar con nada de eso», el año pasado recibieron a Los Indios de Moreno y el programa no fue dejarlos en el hotel, con la play o algo de lo que es habitual por la Capital, y así lo cuenta: «Los chicos de Los Indios tuvieron la experiencia de visitar el campo, la finca, andar a caballo y ordeñar la vaca. No se pueden imaginar como se sorprendieron con estas actividades, ver como se hacen las cosas básicas, que pueden saber, pero capaz no las vieron con sus propios ojos. Quedaron encantados y nos alegró porque son cosas bien nuestras». Por último, nos adelantó que una de las actividades de este año será visitar las Termas de Río Hondo para disfrutar de la pileta y las aguas termales.
Sobre sus visitantes del pasado año, Alejandro expresó algo de lo que pasó en el desfile y es uno de los pilares del Encuentro: «Otra de las cosas lindas que vivimos en el Encuentro fue la de volver a encontrarnos con el equipo que nos había recibido el año pasado, Los Indios de Moreno. Fue un momento muy lindo porque se abrazaban los entrenadores, los jugadores y parecía que eramos familiares del afecto que había. Está bueno todo esto porque uno se olvida del aspecto competitivo y pasa a un momento de amistad».
Por otro lado, el viaje a la Capital les da la posibilidad de reencontrarse con familiares y amigos que no se veían hace mucho tiempo: «Nos pasó que tenemos familiares que viven en Buenos Aires y que los vimos cuando arribamos al club. Algunos habían pasado 5, 10 y hasta tuvimos un caso que hace 20 años no se veían. Nos ha servido también para que nos acompañen muchos padres este año, porque quizás alguno piensa que es fácil subir 55 personas a un micro y viajar a la Capital. Pero hay todo un trabajo atrás, que cada vez se siente un poco más por la situación que vive el país. Sin embargo hemos conseguido el micro para llevar a todos los chicos gratis, sin cobrarle absolutamente nada».
Las Águilas BB representan los valores del deporte como la amistad y la humildad y seguirán volando con otra alegría.