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En el Oeste, uno de los clubes que viene progresando año a año es Estudiantil Porteño. Tras lo que fue la inauguración de su cancha de 3×3, el club piensa en los más chicos y busca expandirse.
Javier Cabrera, entrenador del Minibásquet de Porteño, contó como se fueron sumando chicos durante el 2019: «Nosotros al ser la tira «B» siempre convivimos con el tema de ver si completamos o la falta de chicos. Este año no fue así, ya sea por el buen momento del club o porque a mitad de año hubo un boom con el éxito de la selección nacional, que se transmitió mucho en los chicos que vienen a jugar. Esta temporada probamos con la tercera tira en el Flex, para ver si el año que viene se suma la tira «C» a la temporada normal», explicó.
En ese sentido, este momento es positivo para la institución y el profe así lo expresó: «Este año fue mejor de lo esperado superando nuestras propias expectativas. Tuvimos que cambiar los objetivos que teníamos planeados y eso también está bueno porque los chicos pueden competir y están progresando».
Además del Mini, en Estudiantil Porteño se busca que los jugadores se sientan identificados con el club y de esta manera que este siga creciendo: «Una de nuestras ideas como club es motivar a los chicos para que vengan a ver los partidos de la Primera. Creemos que mirando a los más grandes se puede aprender mucho y también crea un sentido de pertenencia con los colores», cerró Cabrera.