Se realizaron las Reuniones Regionales de FeBAMBA
Con el objetivo de seguir fomentando el desarrollo del básquet en cada...
Almirante Brown es una institución afincada en pleno pulmón de Isidro Casanova, ciudad enmarcada en el partido de La Matanza. Siendo un club conocido primordialmente por la práctica del fútbol (sus equipos compiten con variado suceso dentro de los torneos de ascenso organizados por la AFA), desde hace tres años decidieron incorporar el básquet, actividad que por espacio de tres lustros estuvo ausente dentro del cronograma de deportes.
Con un proyecto encabezado por Gonzalo Barrios, quien como jugador se formó en Vélez Sársfield, donde jugó hasta juveniles y tras un alejamiento de dos años, regresó a despuntar el vicio defendiendo las camisetas de Universidad de La Matanza y Bomberos, entidad también del partido que aglutina quince localidades, entre ellas, Casanova.
Un amigo le ofreció a Gonzalo hacerse cargo de reinstalar el básquet, lo cual se transformaba en un gran desafío, habida cuenta de no tener absolutamente ningún elemento para trabajar. Pero la posibilidad de desarrollar allí un deporte que lo apasiona, fue más fuerte, y arrancaron.
«Comenzamos de cero, la cancha no estaba pintada, no teníamos pelotas; debimos salir a pedir prestadas las cosas», cuenta Barrios, poco antes de iniciar una nueva jornada de entrenamientos con las formativas, y allí se quedará hasta bien entrada la noche, cuando culmine la jornada con la Primera. Un plantel superior que ingresó a los torneos Flex en 2014, y lo tuvo como campeón en la zona Oeste, luego de vencer en dos finales a UNLaM en su casa, una noche donde el gimnasio estuvo colmado con 300 espectadores.
– ¿Cuándo observaste ese panorama apenas llegaste, qué pensaste?
– Fue una mezcla de estusiasmo e incertidumbre, pero muy decidido a trabajar para crecer. Siempre viví en Casanova y soy hincha del club, es un plus a la hora del esfuerzo. Lo primero lo enfoqué en conseguir chicos con deseos de venir a jugar. Empleamos el boca en boca, contacté amigos. Al estar jugando fue fácil, se sumaron muchos jugadores, de Claridad, UNLaM y Bomberos Matanza. Tuvimos que armar dos equipos, el primer día eran 30 tipos entrenando, una locura hermosa. Así comenzó todo, con la mayoría de ellos continuando en el plantel.
Ese 2013 quisieron integrarse a FeBAMBA, pero al no poseer inferiores, debieron jugar en una liga zonal. El año entrante, con la creación del Flex, inmediatamente decidieron inscribirse y participar.Como objetivo inmediato, Almirante Brown busca completar los planteles formativos e integrarse a las competencias formales de la Federación.
«Hasta ahora, tenemos la escuelita armada, y un grupo de cadetes y juveniles; la idea es que en la segunda mitad del año puedan jugar Flex, además de conseguir más horarios de entrenamientos, aunque es un tema complicado, ya que el gimnasio también es utilizado para la práctica de fútbol y sobre todo patín, donde hay muchas competidoras».
Por el momento, los preminis a preinfantiles entrenan los martes de 17.30 a 19 y jueves de 19.30 a 21. Las formativas solo poseen media hora los martes y los jueves de 19 a 21. Los diversos horarios sin dudas influyen como un ítem donde cuesta incorporar más jóvenes (actualmente disponen de 40 en total). Número igualmente valorable al no tener dichos chicos competencia oficial, salvo algunos amistosos aislados. De allí el trabajo contrarreloj para poder inscribirlos en el Flex y desde la competencia real, poder reclutar.
– Después de un año en una liga zonal, deciden intervenir en el Flex de FeBAMBA. ¿Qué los llevó a tomar esa decisión?
– Siempre fue el objetivo, competir en un torneo serio y buen nivel como es el de FeBAMBA, por un motivo de no tener inferiores como te conté antes no pudimos hacerlo, y bueno obviamente son pasos a dar, de a poco y seguro, estamos muy contentos de estar en el Flex y aspiramos a un corto plazo llegar a los torneos de Conferencias.
– Llegan en 2014, y salen campeones.
– Sí, algo nuevo para nosotros, muy motivador; tuvimos un gran año donde perdimos solo tres partidos y de local culminamos invictos.
– ¿Cómo fue el desarrollo del torneo, en cuanto a rendimiento y resultados?
– Con mucha expectativa, buenos jugadores, pero se perdió el primer partido contra Juvencia, un equipo que no figuraba como candidato. Se esperaba mucho y fue un cachetazo, pero sirvió de mucho para que veamos que nada es fácil. De ahí en más, el rendimiento fue creciendo, basándonos en una defensa muy fuerte y solidaria. Se jugó dos rondas en primera fase y se llegó a playoffs con ventaja de localía en todos los cruces, por terminar primero en la zona. Jugamos cuartos de final contra Afalp, semis ante Padua y final frente a Unlam. Partidos muy duros todos. Y la final fue tremenda, por el marco de publico; Almirante es un club de mucha convocatoria, y se están acercando al básquet, con ansias de colaborar. Hubo más de 300 personas en el gimnasio , un partido súper chivo, donde estuvimos abajo casi todo el tiempo y a falta de un minuto pasamos al frente con un triple y desde ahí, fueron dos grandes defensas, donde Unlam tuvo el tiro del final, que no tocó el aro. Ganamos 62-61.
– Y este año arrancan de nuevo , con el desafío de retener la corona.
– Sí, es el objetivo,aunque también mi objetivo como entrenador es lograr una identidad de juego definida, en equipo, defensa agresiva y prepararnos para el futuro también, ya que queremos entrar en la competencia formal de FeBAMBA pisando fuerte.
– Arrancaron bien, ganando hasta el momento los cuatro juegos.
– Tuvimos un buen arranque, contra equipos intensos como Ramos Mejía y Padua, integrados por chicos jóvenes; pudimos sacar buenas ventajas y buen rendimiento en ambos partidos. También una victoria holgada contra Argentino de Castelar y el sábado pasado frente a Crovara tuvimos el partido más parejo , ganamos por seis, con juego muy áspero, que nos sirvió mucho de cara al futuro.
El plantel que participa con gran suceso y expectativas de llegar a fin del certamen peleando por puestos de vanguardia, está integrado por Lucas y Andrés Flossi, Lucas Sosa, Eduardo Martín, Sergio Quiroga, Matías Romar, Eduardo Sánchez, Hernán Olivera, Gabriel Benítez (capitán), Francisco Roca, Federico Spalek, Ezequiel Días y Gabriel Ventrice. Junto a Gonzalo, el cuerpo técnico se completa con Gastón Muller como asistente y Ricardo Charubi en estadísticas.
– Brown es un club muy identificado con el fútbol. ¿La gente va entendiendo que el básquet arrancó con buen pie?
– De a poco, se van sumando agrupaciones de socios que nos ayudaron en conseguir varias cosas, como los nuevos aros profesionales, pintar la cancha , cambiar bancos de suplentes, etc. Al ganar, la gente se siente mas atraída, y sobre todo al ver que estos chicos hacen un gran esfuerzo y defienden la camiseta a muerte se sienten muy identificados.Como decís es un club de fútbol, por tanto, es una pelea muy difícil, pero vamos superando las expectativas de manera sólida.
Almirante Brown sigue trabajando con la meta de integrarse lo más pronto posible a los torneos formales de FeBAMBA. Mientras tanto, ostentan el cartel de campeones en el Flex, y por cómo arrancaron el 2015, tienen todas las intenciones de revalidarlo.