Harrods +46: «Maxi básquet es amistad y el lema de los minis se repite»
Tras casi un mes de competencia de la segunda parte del torneo...
Tras casi un mes de competencia de la segunda parte del torneo de maxi básquet, la categoría +46 de Harrods está de vuelta en el ruedo para seguir sumando experiencias con el deporte como excusa para pasar y vivir momentos únicos con amigos.
En relación a cómo nació la idea de conformar un equipo en el club ubicado en Belgrano, Marcelino afirmó: «Harrods tiene equipo de veteranos desde el 2007 y 2008. Yo me sumé en el 2010. El núcleo de este grupo ya tiene más de 15 años, somos entre 25 y 30 amigos que conformamos ambas categorías. Es un grupo espectacular que se ha venido sosteniendo hace muchísimo tiempo y del cual estamos muy orgullosos».
Por otro lado, en base a los objetivos del torneo 2025, el referente del equipo porteño añadió: «Competimos con Harrods en +41 y +46. Estamos jugando la zona de abajo dentro de la categoría A, la aspiración es meternos entre los 3 de arriba para jugar playoffs por el campeonato y ahí veremos cuánto ruido podemos hacer».
Además, el líder dentro de la cancha se refirió a lo que significa jugar al básquet con amigos: «Una doble satisfacción: hacer el deporte que uno ama y con personas por las que se tiene mucho aprecio y cariño. Dejamos todo en la cancha y fuera de ella, en los asados, en compartir tiempo juntos y en viajes en donde representamos al club, en torneos en otras provincias e inclusive al país en torneos mundiales o panamericanos».
Por su parte, uno de los capitanes del conjunto con más de 100 años de vida definió lo que representa este certamen para él y sus compañeros: «Maxi básquet es amistad. El lema de los minis se repite».
Por último, Marcelino detalló lo que es tener un torneo de veteranos: «Los torneos de veteranos son muy importantes porque es un espacio en donde se puede desarrollar la práctica de este hermoso deporte, compitiendo y generando esa misma adrenalina que teníamos cuando éramos chicos. Por otro lado, involucra a los clubes, que son los lugares donde todos pasamos mucho tiempo de nuestras vidas y contribuyeron a nuestra formación como personas, así que mantener este espacio e inclusive poder compartirlo con nuestros hijos es muy gratificante. Los entrenamientos padres contra hijos son espectaculares».